344 Habilidades insignificantes de los insectos (segunda actualización)

¿Sangre?

La luz espiritual de Chu Jin destelló mientras levantaba la vista hacia el Tigre Blanco, una curva escalofriante formándose en sus labios.

—¡Puesto que ese es el caso, no me queda más remedio que recurrir a este método!

Levantó la mano rápidamente, formando un sello.

—Con mi sangre, sello tu cuerpo, invoco las cinco reencarnaciones, inicio el Pacto de Sangre...

Su cabello danzaba sin viento, su ropa ondeaba, y en ese momento, todo su ser estaba suspendido en el aire; dentro de sus pupilas, originalmente oscuras, ahora brillaba una luz roja hechizante.

Como si la Doncella Mística del Noveno Cielo hubiera descendido, renacida de las llamas.

Esa era Chu Jin, pero no era Chu Jin.

Los ojos de Dai Yu estaban llenos de incredulidad mientras miraba todo lo que se desarrollaba ante ella.

Sorpresa y renuencia.

Nunca pensó que alguien que ni siquiera podía recoger la fruta del Fénix pudiera realmente...

Debe ser una ilusión.