—La idea de Aldric de pasar a la acción fue instantánea.
Islinda soltó un grito sorprendido cuando él hizo que sus pantalones se rasgaran en pedazos y quedó desnudo ante ella.
—Islinda tragó saliva cuando su mirada cayó sobre su miembro duro como el acero frente a ella. Era tan grande como ella recordaba y no pudo evitar estremecerse.
—Eli era un amante hábil pero compasivo, pero lo mismo no se podía decir de Aldric. Tal como prometió, iba a destruirla esta noche. Pero incluso así, Islinda no pudo reprimir el escalofrío de anticipación que la invadió. Aún lo deseaba. Lo deseaba a él.
—Su movimiento fue súbito y calculado mientras Islinda era empujada contra la pared, y ella rodeó su cintura con sus brazos y piernas.
—Se miraron a los ojos y Aldric le dijo: "No sabes cuanto he esperado por esto."
—Sin previo aviso, penetró en ella con fuerza e Islinda soltó un grito ahogado que resonó por la habitación, la sensación surcando a través de ella.