—Es una idea muy buena, seremos la familia de la pequeña Nikita —agradeció Lavanda.
—No necesitas agradecernos. Somos familia —les dijo Ryder.
HADES
Unos días después...
—Reni estaba frente a la puerta de Azazel. Se preguntaba si incluso estaba haciendo lo correcto. Pero después de pasar un tiempo en Hades, concluyó que el demonio que conocía era mejor que otros demonios allá fuera.
Ya ni le importaría volver a estar encadenado.
Hades era un lugar terrible sin ley. Reni había pensado que los demonios no podían ser heridos, pero al parecer estaba equivocado.
La pandilla de demonios a la que había seguido topándose había encontrado formas realmente creativas de lastimarlo. Y lo peor es que nadie estaba dispuesto a ayudarlo, no conocía a nadie.
Reni se preguntaba si Azazel había sabido de los problemas que enfrentaría en Hades cuando lo liberó. El bastardo probablemente lo sabía. Reni lo pensó para sí mismo.