—Está bien, ahora pueden dejárnoslo a nosotros —dijo Naoya con confianza y firme convicción—. Tal vez fallaría cruzando el campo él solo, pero se aseguraría de tener éxito esta vez.
Después de que Bassena y Han Joon encontraron la ruina, que resultó ser más grande de lo que pensaban, concluyeron que había algo allí dentro, basándose en la reacción del fragmento. A diferencia de antes, cuando el fragmento apenas reaccionaba, zumbó fuerte a lo largo de la pared de la ruina.
Cuando salieron más tarde después de dejar una marca y hacer una cuerda guía desde la ruina hasta la primera cuerda, recibieron la confirmación del cuidador del fragmento.
En efecto, Zein les dijo que el fragmento sentía una presencia confusa en lo profundo de la ruina.
Por supuesto, podría ser algo completamente diferente, en vez de la fuente. Pero aún así encontraron algo, y Naoya estaba decidido a descubrirlo esta vez.