—Como ha dicho Walter, por favor, tengan paciencia y comprensión por Su Majestad. Estaba acostumbrado a luchar por el Imperio la mayor parte del tiempo. Podría haber sido nuestra culpa por permitirle unirse al campo de batalla desde que era joven —Regis también se disculpó como lo hizo Walter.
«Estoy bastante sorprendido de que Su Majestad pudiera permanecer en Valeria por más de una década a pesar de su aburrimiento con la vida y su impaciencia en todo. Me alivia bastante que no se haya suicidado solo para poder regresar a Estrella de manera definitiva. Pero eso no le impidió encontrar a otras personas para hacerlo en su lugar», pensó Regis.
—Por favor, no se preocupen por eso. Era un asunto importante. Entiendo que Su Majestad tenía que ir.
Arabella aprendió que Regis, Walter y Ramón permitían que Fernando estuviera en el campo de batalla tanto como él quisiera, ya que era su única forma de aliviar su aburrimiento aparte de la caza.