—El Señor de la Ciudad acababa de salir y le había confiado la seguridad de Ciudad Aerópolis.
—Si el Señor de la Ciudad regresaba y encontraba la ciudad en caos, ¿cómo se lo explicaría?
—La ciudad entró en estado de aislamiento, sin permitir que los Demonios entraran o salieran para evitar que cualquier cultivador humano se infiltrara.
—Las tropas de demonios zigzagueaban por la ciudad, realizando búsquedas exhaustivas.
—Los informes seguían llegando, pero no se encontraba rastro alguno del cultivador humano.
—Mozzeron se volvía cada vez más agitado.
—Si el intruso no estaba en ninguno de los lugares conocidos, ¿dónde podrían estar?
—De repente, una realización lo golpeó, y su rostro cambió dramáticamente —¡No es bueno! ¡Síganme a la residencia del Señor de la Ciudad!
—En ese momento, un poderoso aura de Núcleo Dorado descendió del cielo.