Fingir Ser Débil Para Comer al Tigre (Parte 4)

La mirada de Amalia se volvió fría mientras observaba la figura huyendo de Orzoth.

Una hoja que apareció en su mano en algún momento, disparó un haz afilado que golpeó a Orzoth directamente en la espalda.

Orzoth soltó un grito miserable y aceleró su escape, chocando contra una pared de piedra, su aliento se debilitó instantáneamente.

—Tan despiadada... —Kenny Lin miró a Amalia con miedo, dándose cuenta de lo cerca de la muerte que estaba Orzoth, preguntándose cuánto deseaba Amalia golpearlo.

—Puedo ser aún más despiadada, ¿lo crees? —Amalia le lanzó una mirada fría.

Kenny Lin asintió rápidamente con la cabeza, —Creo, creo.

¿Cómo podría no creerlo?

—Ve a comprobar si está muerto.

Amalia envainó su hoja y fue a inspeccionar el cadáver de Erod.

Sin verlos muertos con sus propios ojos, no podía estar tranquila.

Kenny Lin, al ver su comportamiento frío, obedientemente fue a buscar el cuerpo de Orzoth.

Después de caer del cielo, Orzoth había aterrizado en un trozo de césped.