La aparición de Samantha le trajo a Eric un dilema. Devolverle el dinero sería un insulto para ella.
Pero si no le devolvía el favor, siempre se sentiría en deuda, sintiéndose inferior a ella en su mente.
Eric llamó a Ella, diciéndole que llegaría a casa más tarde. Había salido con algunos amigos a tomar algo en el Elite Horizon Club, y se sintió un poco mejor antes de regresar a casa.
No le ocultaba nada a Ella, expresando claramente tanto las intenciones de Samantha como las exigencias de Nicholas.
Ella no estaba particularmente angustiada. Sonrió levemente:
—Como Samantha ya tiene segundas intenciones, no puede ser una persona mezquina. Pero Nicholas…
Nicholas no solo era protector con su hermana; quizás pensaba que era vergonzoso para ella ser rechazada y podría perseguirlo obstinadamente.