Jian Yufei extendió la lana extra y le dijo —Llévate estas y guárdalas.
Él actuó como si no hubiera escuchado. Después de un rato, trajo un montón de lana.
Había roja, y había blanca.
Frente a su expresión perpleja, él explicó con calma —La roja es para mamá, la blanca es para ti.
—Entonces esta extra… —Jian Yufei no había terminado su frase cuando se dio cuenta de todo.
Ella lo miró con una mirada confundida, como intentando ver si era un impostor.
Nunca se habría imaginado que Ruan Tianling le pediría activamente que le tejiera una bufanda.
Cada pieza de ropa que llevaba de pies a cabeza era de marca de diseñador.
Realmente no podía entender por qué valoraría una bufanda que ella tejiera.
Ruan Tianling se sintió incómodo bajo su mirada, esta era la primera vez que sentía esta clase de vergüenza.
—¿Qué miras, hay algún problema? —Él replicó casualmente.
Jian Yufei negó con la cabeza —No hay problema, la lana está comprada. Vamos a casa.