Reclamo Absurdo

El salón entero estaba envuelto en un silencio sepulcral mientras todos procesaban lo que acababa de suceder.

Dos mil millones acababan de ser desperdiciados—justo así.

Ivan apretó los puños. Él había querido ese perfume, pero no solo lo había obtenido Natalie—se había atrevido a romperlo.

—Ivan, lo hizo a propósito —susurró Briena—. Le dije antes de que estábamos aquí para conseguir este perfume. Estoy segura de que hizo esto solo para burlarse de nosotros.

—Actúa como si no le importara, pero en realidad, está celosa de verte a ti dos juntos —añadió Irene.

La ira de Ivan crecía.

Ese perfume podría haber sido su gran avance—pero Natalie se lo había arrebatado, por celos…

La Reina observó sorprendida, intrigada por la acción repentina de Natalie. Siempre se había mostrado tranquila y compuesta, ¿así que qué había provocado esto?

—Abuelo, ¿cómo se atreve a comportarse de esta manera? —siseó Charlotte a Howard—. Hoy tengo que darle una lección.

—Adelante.