¿En qué me he convertido?

—¡Awooooo!

El aullido majestuoso e inusual sacudió la tierra, resonando en el aire, un sonido tan extraordinario que partió las nubes oscuras y agitó el mar inquieto. Parecía como si el universo mismo estuviera celebrando un despertar largamente esperado.

Rayos de luz lunar se deslizaron hacia abajo, iluminando a la imponente criatura que se mantenía firme sobre el océano revuelto. Parecía un ser sacado directamente de mitos y libros de cuentos. Su grueso pelaje plateado exudaba un brillo divino, pero la locura y ferocidad en sus ojos ónice y pupilas doradas indicaban que podría haber emergido de las profundidades del Infierno. Una paradoja de terror y fascinación, era una vista tanto hermosamente inquietante como temerosamente cautivadora.

El poderoso aullido no solo sacudió a la gente del mar de su furia frenética, sino que también hizo que Shen Nianzu volviera en sí.