La inteligente IA que no podía leer el ambiente lo apagó y comenzó a parlotear sin cesar. —Jefe, busqué en línea diez remedios para los celos y los resultados son... bastante interesantes —dijo el sistema tratando de ganarse a Wen Qinxi como el estudiante favorito del profesor.
—¿Qué? —preguntó Wen Qinxi girándose para acostarse de espaldas mirando al techo. Estaba pensando que tal vez los consejos serían útiles para poder dormir un poco, pero claro, ¿qué más podría esperar de internet? Todos eran curas a largo plazo pero no había curas a corto plazo.
—Eh... primero está reconocer que tienes un problema y luego jajaja... confiar en ellos. Ese no es muy útil, ¿verdad? —dijo el sistema tratando de aliviar el ambiente.
—Luego, eh... está bien, este es bueno. Dice que te mantengas ocupado y trabajes en tu autoestima —continuó el sistema, pero juzgando por la reacción de Wen Qinxi, no parecía útil.