Capítulo 912 Supresión

Ficknilas no parecía ansioso por acabar rápidamente con la vida de Aiven. Era más como un gato salvaje jugando con un ratón indefenso, con la intención de destruir por completo el espíritu y la voluntad de Aiven. Cada vez que veía la cara serena de Aiven, una irritación inexplicable emergía en su pecho.

—No eres nada especial —dijo Aiven sin inmutarse.

Aunque su cuerpo portaba numerosas heridas y parecía bastante desaliñado, las lesiones no eran graves. Aiven había logrado evadir los golpes críticos de los ataques de Fick.

¡En cuanto a experiencia de combate, Ficknilas estaba a mundos de distancia de Aiven!

—¡Tu pequeño compañero no lo logrará! —exclamó Jenny, incapaz de contenerse mientras miraba al ensangrentado Aiven—. ¿Realmente vas a quedarte ahí viendo cómo muere en el escenario?

La expresión de Ling Feng permanecía calma, sin mostrar señales de preocupación. En cambio, una leve sonrisa apareció en la comisura de sus labios.