Capítulo 725: El Veneno Mata-Dioses

En ese momento, en un bosque apartado del parque, una mujer delicada se sentaba en un banco, leyendo un libro bajo la luz de una farola.

Era entrada la noche, y una mujer leyendo allí resultaba muy inquietante.

—Chicos, miren a esa chica, está buenísima y, además, es extranjera. ¿Qué dicen? ¿Nos acercamos? —justo entonces, unos holgazanes con malas intenciones miraron a la mujer, con sus ojos llenos de lujuria.

Habían estado bebiendo y no esperaban encontrarse con una mujer extranjera sola a esas horas, no podían evitar entretener pensamientos pervertidos.

—¿Y si llama a la policía? —uno de ellos dijo con preocupación.

—Probablemente no lo hará. ¿No viste que es extranjera? Quizás ni siquiera habla bien chino, ¿cómo llamaría a la policía? Además, está tan oscuro que, incluso si llamara, ¿qué importa? ¿Nos reconocerían? —alguien respondió de inmediato.