—Eres realmente olvidadizo, ¿verdad? Los productos que pediste, ya los envié a la dirección que proporcionaste.
Cuando se abordó el tema del dinero, Cheng Bo también reveló una mentalidad de sirviente, pronunciando palabras aduladoras. Este era un asunto inevitable, y para ese momento habían llegado al último paso: solo intercambiar los productos por dinero. Sin embargo, era exactamente este paso el que hacía que la gente se sintiera más incómoda y ansiosa.
Las diferencias inevitables en percepción conducen a algunos prejuicios en el estatus. Por ejemplo, esta multa por incumplimiento de contrato: si Hao Jian no recogía los productos, entonces tendría que pagar una multa considerable. Sin embargo, lo que Cheng Bo no sabía era que la cláusula de multa en el contrato era una trampa textual que ya había desaparecido.