Capítulo 957: ¡Ruega!

Frente a la súplica de clemencia de Sang Tu, los ojos de Zhou Yu brillaron con una fría sonrisa. Parecía que este hombre estaba familiarizado con los métodos de la Aguja de Control del Alma. En ese caso, se volvió sencillo.

—Dejarte ir no es imposible.

—Sin embargo, tengo dos condiciones.

—Por favor, nómbralas —dijo rápidamente Sang Tu.

—Primero, llévanos al Clan del Gu de Sangre sin ser descubiertos por nadie.

—Esto... ¡Es imposible! —Sang Tu luchó brevemente y se negó rotundamente.

El rostro de Zhou Yu se oscureció, apareciendo una expresión escalofriante.

—¿No tienes miedo a morir?

Sang Tu asintió y dijo:

—Miedo.

—Pero temo aún más las consecuencias de llevarte a mi clan, lo que podría resultar en un desastre catastrófico para mi gente. En ese caso, me convertiría en un pecador.