Al oír que Zhao Fei'er ha sido capturada.
En un instante, una intención gélida surgió del cuerpo de Zhou Yu.
—¡Él... está pidiendo su muerte!
Viendo a Zhou Yu enfurecerse, Zhao Da se apresuró a apaciguarlo.
—Sr. Zhou, por favor no se preocupe todavía.
—Después de todo, todavía soy un miembro de la Familia Ao, Han Minghao me dará algo de cara.
—Trataré de mediar en el medio para usted e intentar evitar cualquier conflicto.
—Han Minghao es una figura muy prominente en Shanghai.
—¿Prominente? —Zhou Yu entrecerró los ojos y preguntó fríamente.
—Sí. —Zhao Da asintió.
—Es conocido como el artista marcial más destacado entre la joven generación en Shanghai.
—Su cultivo y fuerza son insondables.
—¿El artista marcial más destacado entre la joven generación? —Zhou Yu se burló—. Con razón es tan arrogante.
—Entonces tengo que verlo por mí mismo.
Zhao Da detuvo apresuradamente a Zhou Yu.