—Ay... Pases mensuales... He estado trabajando tan duro en mi escritura, ¿por qué es tan difícil rogar por un solo pase mensual... lágrimas...
—————————————————
—¿Tiene cita? —La recepcionista miró a Xiao Yi, vestido sencillamente, con una expresión de sorpresa fugaz en sus ojos, pero su rostro aún mantenía una sonrisa educada y formulista al hablar.
—No, no he venido a discutir nada, solo a cambiar unas palabras con él antes de irme —Xiao Yi sonrió. La pregunta de la recepcionista o su mirada un poco extraña no le molestaron, y la entendió muy bien. Después de todo, Chen Jianguo era un hombre ocupado y no podía reunirse con todos los que lo solicitaban, así que mantuvo su explicación cortés.