FancyZ

1.
Todos saben que el alfa más poderoso en el mundo de los hombres lobo es Harrison. Hay muchas leyendas sobre él. Una de las cosas más misteriosas es que nunca anunció a su Luna. Durante seis años, no habló de su compañera, y ninguna mujer podía acercársele.
2.
Seis años más tarde, Kayla regresó a la ciudad donde vivía. En un encuentro, Harrison, con ojos rojos y voz ronca, la presionó contra la pared y dijo, “¿Crees que tus lágrimas aún funcionan conmigo?”
Kayla miró hacia abajo y no habló. De repente, una voz infantil nítida sonó. “Mamá, ¿qué haces aquí?”
Mirando a la niña, sus pupilas se contrajeron.
“¿Es esta tu hija?” preguntó.
3.
“¿Así que rompiste con el padre? Él te tuvo y luego te abandonó a ti y a tu hija”, preguntó Harrison arrojando su cigarro al cenicero, las comisuras de sus labios temblaban de ira.
“Dime quién es el padre y haré que pague”. 
Kayla miró al hombre que había extrañado durante seis años. No sabía cómo decirle que él era el padre.

Regreso con el Bebé Secreto del Alfa

La expresión y las palabras de Carlos son muy raras, muy diferentes de lo habitual. Parecía tener miedo de mirarme a los ojos, luego dijo algo de repente y se dio la vuelta para irse.


Observé su figura apresurada, preguntándome qué había sucedido.


Fue a la puerta, y en el momento en que su mano giró la perilla, miró hacia atrás otra vez. Bajo mi mirada perpleja, caminó en silencio hacia mi lado, se sentó en la silla junto a la cama y respiró hondo como si hubiera tomado una decisión importante.


—Lo siento... Te mentí, Selena. Dijiste algo en tu sueño, y lo escuché... —reveló Carlos.


Mi corazón se aceleró, y todos los músculos de mi cuerpo se tensaron al límite. —Yo... ¿Qué dije? —Agarré la colcha y tragué saliva. No debería haber escuchado mis palabras sobre el hombre, ¿verdad?


Carlos se sentó, y no pude leer nada útil de su expresión excepto la lucha.


—Si estás bien ahora, creo que deberíamos hablar —reflexionó.


¿Debería decirle?