Jared
La observé examinar el nuevo Criptex, girándolo bajo la luz del sol que entraba por la ventana. Lo sostenía con una mano envuelta en una toalla, usando el extremo de su cepillo de dientes para empujar suavemente los lados, buscando los mecanismos que hacían que las piezas conectivas se soltaran.
Verla trabajar era embriagador. Nunca había visto a alguien tan completamente enfocado en una única tarea. La forma en que examinaba el Criptex era intrínseca, prácticamente parte de su naturaleza. Mis movimientos en el fondo parecían no molestarla en absoluto mientras empacaba nuestras cosas en preparación para nuestro regreso a casa.