¿Esto es hacer trampa?

Jiang Yexun miró a la pequeña en sus brazos, tan suave y obediente, y su corazón se calentó.

No pudo resistirse, bajó la cabeza y besó sus rosados labios.

Sus suaves labios llevaban una fragancia tenue que agitó algo en Jiang Yexun, haciéndolo sentir un poco más emocionado.

Pero rápidamente recordó que esta era la casa de Su, y no se atrevió a ir demasiado lejos. Así que hizo un esfuerzo consciente por contenerse.

Su beso fue suave, persistente, explorando con suavidad su dulce invitación.

Una mano grande descansaba en la nuca de Su Xiaoxiao, deslizándose lentamente en el cuello de su ropa, acariciándola con profunda afecto.

Debido a la ternura, su beso duró más de lo habitual.

Cuando se separaron, ambos habían caído sobre el sofá.

Con reluctancia, Jiang Yexun dejó ir esos dulces labios rojos y atrajo a Su Xiaoxiao a sus brazos, acariciando suavemente sus dedos suaves y delgados.