Él nunca me habría dado espacio después de eso, me habría enjaulado cerca de él en todo momento y nunca me habría dejado salir de su vista. Habría puesto aún más tensión en nuestra relación y eso no lo quería para nada.
Los sonidos de débiles gemidos y quejidos me sobresaltan sacándome de mis pensamientos y me apresuro hacia el salón lo más rápido que puedo. Ira suele estar ocupada atendiendo a las hembras de la manada y Alfa Giovanni también está a menudo ocupado con sus deberes, lo que deja a su hermana de cinco años, Gianna, sola la mayor parte del tiempo. A ella le encanta correr por la casa y a menudo tropieza y cae por todas partes. Y a veces he notado que lo hace a propósito para llamar la atención de su hermano, que apenas tiene tiempo para pasar con ella.