Punto de vista de Amelia
El trayecto al hospital fue silencioso. Podía sentir las miradas de Caleb y Clara sobre mí, sostenían variados grados de lástima y preocupación, pero ni siquiera podía mirarlos. En el momento en que llegamos al hospital, salí del coche. Intentaron seguirme, pero los ignoré y me dirigí directo a la oficina de la Dra. Brown. Ninguna de las enfermeras intentó detenerme, todas me reconocieron fácilmente de todas las veces que había venido aquí con Kaden. Sentí sus miradas atentas y curiosas, pero las ignoré.
Sin llamar, abrí la puerta de golpe. La Dra. Brown estaba furiosa, por decir lo menos, pero tan pronto como me vio, toda pelea se desinfló de ella. —¿Estás bien? —preguntó.
Asentí. —Necesito que verifiques y asegures que nada está roto. Luego también necesito que te asegures de que nadie venga a mi habitación esta noche, quiero estar sola.
—Amelia —empezó.