PUNTO DE VISTA DE KADEN
Entré a la habitación y todos los guardias empezaron a inquietarse en cuanto posaron sus ojos en mí. No fui ayer como había planeado, en su lugar fui a visitar a Clara, con la esperanza de que recordara las caras, pero no fue así, y eso me puso de tan mal humor que no pude darme el lujo de ver a nadie más.
No había mucha confusión entre los guardias, todos sabían por qué estaban ahí. Yo solo buscaba a los culpables. El problema era que tenía al menos treinta hombres en esta sala.
Tomé el asiento que habían dejado reservado para mí mientras todos ellos permanecían de pie con las manos entrelazadas detrás de ellos.
—Saben por qué están aquí.
—Sí, Alfa —respondieron al unísono.