CAPÍTULO 264 Nuestro Día a Solas (Parte Uno)

Punto de Vista de Sophia

Desbloqueé la puerta de la cabaña justo cuando sentí los labios de Hunter en mi cuello. Gemí y me incliné hacia él.

—Me encanta el sabor de tu piel —murmuró Hunter en voz baja.

Tirité cuando sus labios alcanzaron la marca en mi cuello. Podía sentir cosquilleos en mi vientre bajo extendiéndose por mi cuerpo. Me sentía excitada. Los músculos de mis piernas temblaban y estaba agradecida de estar apoyada en Hunter.

—Joder, Sophia, puedo oler te —dijo Hunter, gruñendo en voz baja.

Tragué e intenté contener un gemido. Era tan difícil, sin embargo. Sus labios se sentían tan bien en mi cuello y mi cuerpo necesitaba darle confirmación.

Gemí de nuevo cuando comenzó a succionar su marca en mi cuello. Jadeé y me estremecí con la intensa sensación. Hunter me agarró por la cintura y me apretó contra él. Podía sentir su dureza contra mi espalda y la necesidad por él explotó dentro de mí.

—Te necesito —gemí, haciendo que él gruñera y se presionara contra mí.