Pero ¿exactamente quién?

Las cejas de Arwen se fruncieron en un profundo ceño al escuchar las palabras de Gianna. Ante su escepticismo, Gianna rápidamente explicó lo que intentaba decir.

—Wenna, sé que esto no parece tener mucho sentido, pero existe una posibilidad real de que ella estuviera detrás de esto —dijo, sin esperar ni un segundo antes de continuar—. Quiero decir, esos hombres te estaban siguiendo seriamente con la intención de hacerte daño. ¿Y quién más querría hacerte daño, excepto Delyth? Eras un obstáculo en su camino. Tu compromiso con Ryan era lo único que la impedía tenerlo todo para ella sola. Sin ti, lo hubiera tenido fácilmente. Ella tenía todos los motivos para quererte fuera de la imagen.

—Causarme problemas es una cosa, Anna. ¿Pero contratar a personas para que me persigan y me maten? Eso es algo siniestro. Delyth no podría caer tan bajo... ¿o sí? —Arwen dudó, luchando por aceptar esa cruel posibilidad.

Pero Gianna estaba mucho más abierta a ello. Sacudiendo la cabeza, insistió: