-Capítulo 201-

—¿A dónde crees que vas? —preguntó Lake mientras se volvía ante el tono frío de Arthur, con un visible ceño fruncido en su rostro.

—¿A casa? —respondió en voz baja—. He terminado mis deberes.

—Ni de broma —gruñó Arthur, sus manos enguantadas se cerraron como si estuviera conteniendo el impulso de golpearlo—. Estarás limpiando el ala principal a fondo y te prohíbo salir hasta que yo personalmente apruebe tu trabajo.

Lake observó al mayordomo alejarse con una mirada cansada en sus ojos marrones claros, realmente debería haber sabido que esto sucedería.

Ignoró las risitas de las otras sirvientas a su lado que también se preparaban para irse por el día.

Sabía que era el menos favorito para todos, pero su trabajo estaba bien pagado, no tenía planes de irse.

Había trabajado para la familia de la Mafia de los Blacks toda su vida, no tenía a dónde ir.