La pasarela brillaba con un caleidoscopio de luces, y los hermosos modelos masculinos y femeninos desfilaban con la impresionante vestimenta de la última temporada. Un mar de periodistas y celebridades destellaba sus cámaras sin cesar.
La escena animada y ruidosa era una que a la mayoría de las damas de la alta sociedad les encantaba.
Shen Li había pensado que a ella también le gustaría, pero al llegar, se encontró algo aturdida.
—Señorita Shen... —la señora Geno llamó suavemente.
Huo Siyu no había venido y Shen Li había venido sola, pero esto todavía se consideraba un gran honor. Además, teniendo en cuenta lo que había ocurrido anteriormente, la señora Geno se aseguró de acompañarla durante todo el evento, asegurando que nada sucediera para desagradar a Shen Li.
Como resultado, aunque Shen Li había llegado, su espíritu parecía ausente ya que permanecía en silencio.
Shen Li volvió a la realidad, sonrió a la señora Geno e intentó no parecer demasiado avergonzada.