—Creo que he empezado a quererte...
—Creo que he empezado a quererte...
Una simple frase que Shen Li no sabía cuántas veces había dicho.
Era como cuando ella y Huo Siyu habían estado tantas veces en una bañera tan cálida.
Finalmente, Huo Siyu la llevó fuera del baño, la colocó sobre la cama, y se abrazaron fuertemente.
Sintiendo que se estaban fundiendo en uno solo, acostada en los brazos de Huo Siyu, siendo sostenida, con sus cuerpos presionados cercanamente, mirando a sus ojos tiernos, sintiendo sus movimientos cálidos, esa sensación... era realmente dichosa.
—Siyu...
Shen Li llamó su nombre, su cuerpo ya no obedecía sus comandos, su consciencia algo borrosa.
Apoyando su cabeza contra su pecho, sintiendo su calor corporal, todo lo que podía ver era su imagen.
Huo Siyu...
Siyu...
El nombre escapaba de sus labios una y otra vez, sonando como felicidad, pero también como suspiros.