¡Jindo muere y la familia Park se rinde!

Todos presenciaron una escena que nunca podrán olvidar durante el resto de sus vidas.

Vieron una colosal mano dorada elevarse hacia el cielo. Era vasta y majestuosa. La colosal mano dorada agarró la enorme luz de la espada con precisión impecable.

¡La expansiva luz de la espada quería destruirlo todo!

¡Sin embargo, la colosal mano dorada era incomparablemente abrumadora!

¡Bang!

Tras el ensordecedor ruido, la colosal mano dorada aplastó la enorme luz de la espada en un instante. La enorme luz de la espada no tuvo oportunidad contra ella, como si estuviera aplastando todo a su paso.

¡La batalla entre las dos habilidades desencadenó una ola de explosiones!

¡Muros de niebla de humo y polvo contaminaron la escena!

¡Pu!

Jindo sintió un nudo en la garganta y de inmediato escupió un bocado de sangre fresca. Entre el interminable humo y polvo, pudo distinguir vagamente una figura delgada parada con orgullo con las manos detrás de la espalda.

—¡China! —dijo Jindo.