—Habiendo aclarado la causa del incidente, todas las miradas convergieron en Ye Chen y Yin Qianjue en la Plataforma del Viento y del Trueno.
—En ese momento, Ye Chen también se levantó. Tras inclinarse ante la Maestra del Palacio Yuan Li, se dirigió directamente a Yin Qianjue —Yin Qianjue, ¿qué más tienes que decir?
—Sintiendo la mirada de innumerables ojos sobre él y oyendo a la Maestra del Palacio Yuan Li hablar en favor de Ye Chen, el rostro de Yin Qianjue se volvió ceniciento.
—Sabía que en tal situación, era absolutamente imposible para él tener una oportunidad de vivir más tiempo.
—Sin embargo, a Yin Qianjue aún le resultaba difícil creer que este joven, más joven que él, pudiera haber matado a Feng Lun Santo Celestial.