Resulta que eran unos sinvergüenzas demoníacos!

—¿Información importante? —El líder del clan Bai frunció el ceño—. ¿Qué podría ser más importante que el manantial espiritual?

—Ya que no es una emergencia, que esperen primero —instruyó antes de volver su mirada a la imagen de humo.

La imagen brilló, mostrando la situación en la cueva; Fang Yuan y el grupo se adentraron más en la cueva, hasta que llegaron al final.

Esta cueva no era grande. La líder del clan Bai se decepcionó al no ver el manantial espiritual, no había manera de que pudiera estar en un lugar como este.

—Parece que todavía necesitamos algo de tiempo para encontrar el manantial espiritual —murmuró la líder del clan Bai. Agitó sus mangas y guardó el humo antes de decir hacia el exterior de la tienda:

— Que pasen.

La solapa de la tienda se abrió; un vigoroso y feroz Maestro Gu investigativo entró y se inclinó:

—Este subordinado saluda a la señora líder del clan, tengo una noticia importante que informar.

Había un rastro de ansiedad en su voz.