—Si quieren practicar en privado, no duden en contactarse para organizar sesiones de combate. Será más efectivo —Ning Zhuo pensó por un momento—. ¿Qué tal esto?: Rentaré un terreno de entrenamiento en el territorio del clan a largo plazo, solo para su uso.
—Pueden ir allá, mostrar sus fichas de cintura, decir sus nombres y usarlo gratuitamente —al escuchar esto, todos aclamaron alegremente.