Un rincón del Campamento de Jade Blanco.
El comandante junior se apresuró a llegar a la escena del incidente:
—¿Qué ha pasado exactamente?
El comandante junior estaba perplejo al no ver bajas entre sus propios soldados. Pero una extraña emoción se enroscaba alrededor de su corazón, ¡una gran anomalía!
—¡Comandante, esto es terrible!
—¡Nuestro Pozo de Mana, nuestro Pozo de Mana ha desaparecido!
—De repente, apareció una esfera de piedra descolorida, ¡y se tragó nuestro Pozo de Mana!
Los soldados informaron la situación en pánico.
Los ojos del comandante junior se abrieron de par en par por la sorpresa:
—¿?!
Observó el espacio vacío donde solía estar el Pozo de Mana.
—Me preguntaba por qué algo parecía extraño —maldecía el comandante junior—. ¿El Pozo de Mana puede ser robado? Los ladrones del Bosque de los Mil Picos deben haberse infiltrado.