Capítulo 353 Demoníaca Gu

—Hao, no te preocupes por el tiempo que tardes —dijo Gato Gordo—. De hecho, cuanto más tardes en recuperarte, más estarás fortaleciendo tu físico, ¡lo cual es una bendición que ni siquiera se podría desear!

—Chu Hao sacudió su cabeza. Aunque su apariencia actual era inofensiva para humanos y animales, no tenía poder de combate, lo cual le hacía sentir muy incómodo.

Ojalá no tomara demasiado tiempo.

—En fin, salgamos de aquí primero —dijo Chu Hao.

—Jeje, ¿pero puedes siquiera caminar ahora? —Gato Gordo rió a carcajadas.

—Chu Hao intentó caminar, pero solo con levantarse ya había alcanzado su límite. Tan pronto como empezó a moverse, cayó de inmediato. Afortunadamente, cayó sobre ropa; de otro modo, caer sobre rocas y barro podría haberle hecho agrietar y sangrar la cabeza.

Vaya desastre.

—¡Gato Gordo, recuerda esto! —comunicó a través del Sentido Divino.

—¡Jajaja! —Gato Gordo no pudo evitar reír otra vez en voz alta.