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Frente a Ling Xiao, Jin Ming no tuvo más remedio que convocar toda su energía y concentrarse al máximo.
De lo contrario, sabía que era poco probable que ganara.
—¿Hmm? —Ling Xiao sintió como si algo estuviera tirando de su cuerpo, impulsándolo hacia las manos de Jin Ming.
—¡Este movimiento es interesante! —Incluso mientras otros exclamaban sorprendidos, aún encontró la compostura mental para evaluar la técnica.
—¡Rociado de Agua Mamut! —Atraer agua y rociar agua eran dos técnicas que se complementaban naturalmente una a la otra.
Atraer agua podía tirar forzosamente a un oponente hacia uno, claro está, siempre y cuando la Esencia Verdadera fuera fuerte; de lo contrario, no sería posible.
Rociar agua, por otro lado, podía concentrar la Esencia Verdadera en un punto y expulsar al oponente.
La letalidad de esta fuerza era tan aterradora que incluso era más poderosa que el Asalto de Mamut y el Pisoteo de Mamut.