Capítulo 50

El recién llegado no era otro que el actual líder de la sala honoraria, Ying Wencheng. Resulta que tenía la intención de visitar a su primer hermano, el actual jefe de clan para preguntar acerca de su sobrino recién llegado, se llevó una sorpresa al presenciar la discusión del recepcionista y un joven.

Su sorpresa aumentó más cuando se dio cuenta de que aquel joven era su sobrino Ying Xuan. Ying Wencheng sabía de su apariencia debido a que su padre le había mostrado un ‹Cristal de imágenes› en donde se podía ver la figura del joven. Algo así como las cámaras fotográficas en el anterior mundo de Ying Xuan.

Saliendo del pasillo, caminó en dirección a Ying Xuan. Por su parte Ying Xuan reconoció a la persona de la misma forma, Ying Long su abuelo le había mostrado un cristal de imágenes en donde se podían ver a todos sus tíos, incluyendo su madre, abuelo y otros dos ancianos cuyas identidades él desconocía, al final Ying Xuan no tuvo tiempo de preguntar quiénes eran esas dos personas.

En el instante en el que Ying Xuan lo vio acercarse dio sus saludos. "Saludos al tercer tío... Tenía pensado hacer una visita al tercer tío después de recoger mi ficha de identidad, pero en este momento estoy teniendo ciertas complicaciones". Dijo Ying Xuan mientras se veía un poco avergonzado.

"Ya veo, así que me conoces. Imagino que mi padre te ha contado acerca de nosotros. Bien, deja toda esta problemáticas sin sentido, ven conmigo, hablemos un poco, después te daré tu ficha de identidad. ¿Qué dices?". Preguntó Ying Wencheng con una sonrisa, era obvio que en verdad estaba feliz por encontrarse con su sobrino.

"Como el tío lo ha pedido este joven no tiene motivos para rechazar". Contestó Ying Xuan que sin dudar lo siguió.

Ying Wencheng asintió. "¡Muy bien!, vamos entonces". Volteando para mirar al anciano recepcionista y al asesor Ru, su sonrisa se desvaneció y les dio a ambos una mirada severa. "En cuanto a ustedes dos, serán reportados al salón disciplinario, hablaré personalmente con Feng para que reciban su merecido castigo".

Cuando escucharon el nombre Feng, ambos sintieron un intenso escalofrío recorriendo sus espaldas, no había otras personas con el nombre Feng en todo el clan Ying. La única persona con ese nombre era el actual líder del salón disciplinario, conocido por ser el líder más estricto de entre todas las generaciones de los otros jefes de disciplina, gracias a esa persona la disciplina dentro del clan se volvió algo que nadie se atrevió a pasar por alto.

Los castigos que este actual jefe de disciplina impartía eran de las más severas que podrían existir, llegando a considerarse como tratos inhumanos. Este actual líder del salón de disciplina era demasiado cruel, no pasaba ninguna falta de disciplina por alto, en el pasado él y el jefe de clan tuvieron ciertas diferencias debido a la forma de pensar de cada uno, algunos castigos aplicados por Ying Feng rompían las reglas del clan.

Por su parte Ying Feng le importaba poco esas reglas, para él el simple hecho de seguir las reglas de un lugar no significa que la persona fuera disciplinada, ¿Qué pasaría si no hubiera reglas? ¿Aún actuarían con disciplina?.

En las palabras de Ying Feng. "La disciplina no se trata de seguir las reglas de una forma superficial. La verdadera disciplina se lleva dentro de uno mismo, debe estar arraigada dentro de nuestras almas, no serás disciplinado solo por obedecer esas reglas, sino para mantener el orden, un orden que traerá la paz no solo para ti, sino para todos a tu alrededor. ¿Qué habría si la disciplina no existiera?... Lo he pensado muchas veces... y en verdad es algo muy aterrador imaginar lo que sería de un mundo en donde la disciplina no existiese".

Sus palabras dejaron a todos en que pensar. Para algunos Ying Feng era un lunático que se aprovechaba de su posición para actuar a su gusto sin ninguna consecuencia, pero al final la gran mayoría pensaba que Ying Feng sin duda era un hombre con una gran vista, y con tal dedicación a ese trabajo sus formas de impartir castigos fueron aceptadas por la mayoría de patriarcas mayores.

Viendo que los patriarcas lo aceptaban, el actual líder de clan, Ying Xuo no tuvo más desistir en seguir persuadiéndolo y simplemente lo dejó pasar. Por su parte Ying Feng no sentía ninguna animosidad hacia el jefe del clan Ying Xuo, al contrario, él sentía cierto grado de respeto porque creía que como líder del clan seguía su propia disciplina al hacer que todos sugieran las reglas establecidas por el clan.

Sin duda era una disciplina que se encontraba muy arraigado dentro de él y tenía la intención de compartirlo con los demás. Pero si bien respetaba esa disciplina, él creía que no tenía la suficiente determinación, comparado con su disciplina la disciplina de Ying Xuo era similar a un frágil cristal que podría romperse con una suave brisa de granizo.

Ying Feng le dijo esas palabras en persona a Ying Xuo, sin embargo, Ying Feng jamás dio una explicación de lo que significaba la fragilidad del cristal al compararlo con su disciplina y el sentido de seguir las reglas del actual jefe de clan.

...

Después de haber pasado un tiempo hablando con su tío, Ying Xuan finalmente salió de la sala honoraria tras recibir su ficha de tercer nivel primer grado, ficha que indicaba su posición como un patriarca menor.

Ying Wencheng le había explicado la utilidad de la ficha de identidad, no solo servía para identificarse como un miembro del clan, sino que también le era útil para acceder a una mayor información en la biblioteca general y en las bibliotecas de especialización. Algo que también le había llamado la atención era el sistema de crédito que el clan había implementado con el uso de la ficha.

Ying Xuan se había preguntado por qué el clan Ying tenía la apariencia de una pequeña ciudad ya que había visto algunos puestos que vendían diversos productos, tiendas establecidas para el comercio, la venta de alimentos y demás productos en general. La respuesta que había recibido fue que eran comerciantes de ciudad ancestro, una ciudad que se podría encontrar al bajar de la cascada en donde se encontraba ubicado el clan Ying en la actualidad.

El clan Ying había implementado un sistema de crédito usando las fichas de identificación de primer grado. En pocas palabras Ying Xuan podía comprar cualquier artículo que quisiera siempre y cuando estuviera permitido en su límite de adquisición, posteriormente los encargados de finanzas en el clan Ying pagarían la deuda una vez que se les notifique la compra.

El río con el que conectaba la cascada era conocida como río del oso espiritual, más allá de la cascada del clan Ying se encontraba una segunda cascada sin un dueño establecido que poseía una densa energía espiritual. Bajo la segunda cascada se estableció una tribu que hasta la fecha había ido creciendo hasta convertirse en una de las potencias del continente, esa no era otra que la tribu del oso espíritu y eran los habitantes de una de las tierras sagradas conocida como ‹Cascadas del oso›.

Por lo que su tío le había comentado, estos miembros de la tribu del oso espíritu tenían costumbres poco refinadas, se vestían completamente de pieles y utilizaban un método primitivo para forjar armas, ellos se especializaban en la caza y siembra de semillas, a pesar de considerarse potencia tuvieron muy poco contacto con el exterior.

Se conocía que eran poco abiertos con los extranjeros y pocas veces comerciaron con extranjeros. Pero de las pocas veces que habían comerciado, la calidad de sus pieles de bestias espirituales se destacó en gran medida, llegando a alcanzar el valor de varios miles de piedras espirituales de nivel inferior.

En el exterior fueron llamados bárbaros de las tierras sagradas. Después de algún tiempo, la gran sensación que había causado la venta de esas pieles se calmó, pero por más que pasó el tiempo ya no se volvieron a vender. Sin duda se trataba de un grupo extremadamente reservado.

...

Ying Xuan caminaba cerca de unos puestos con dirección al salón marcial en busca de algunas técnicas para comenzar a practicar. En el camino encontró un puesto de donde salía un olor dulce, se dio cuenta de que en aquel puesto se reunían muchos niños, pensó que solo era algún tipo de caramelo lo que vendían, sin mucho interés no le prestó mucha atención.

La pequeña Xiao Mei-Mei por su parte miró el puesto en donde se reunían todos los niños, el olor era dulce y muy agradable, se detuvo por un momento, pero al darse cuenta de que se encontraba guiando a Ying Xuan volvió a caminar.

En un principio Ying Xuan no le había tomado importancia a ese puesto, el olor era agradable, pero aun así su curiosidad por probar lo que sea que vendieran en ese puesto no estaba presente. Pero al ver que la pequeña niña se había detenido lo pensó por un momento.

Al principio la niña parecía tímida hacia él, pensó que tal vez esta sería la oportunidad para mejorar la relación de ambos, después de todo esta niña sería su asistente, así que siempre estaría cerca de él a menos que ella pidiese algún cambio.

'De cualquier forma no pierdo nada, aún tengo mucho tiempo. Igual y podría usar este tiempo para convivir con esta pequeña'. Se dijo a sí mismo, y habló para detener a la niña.

"Pequeña Mei, podrías esperar. Compraré algo en ese puesto, ese olor me ha llamado la atención". Dijo Ying Xuan mientras señalaba el puesto que era rodeado por niños.

La niña se detuvo y miró con sorpresa. "Está bien. Creo que al joven maestro le gustará". Dijo la niña aun siendo tímida.

"¿En serio? Y ¿Qué venden ahí?". Preguntó Ying Xuan.

"Se llama pan de miel. Es un postre popular único en esta región, a muchos les gusta su sabor". Respondió un poco animada.

"Ya veo. Debe ser algo muy popular". Al escuchar que era único en la región, pensó que después de todo tal vez era una buena idea probarlo. Llegaron al puesto y esperaron su turno, finalmente pidió uno para él y otro para la niña.

Cuando la niña recibió el suyo fue sorprendida, no había imaginado que este joven maestro comprara también para ella. Lo miró con ojos bien abiertos llenos de extrañeza.

Ying Xuan se sintió un poco incómodo por ese tipo de mirada que recibía de esta pequeña, era como si mirara a un monstruo sanguinario siendo amable con las personas que serían sus presas. Tal vez lo estaba sobrepensando.

...

Fue hace un mes atrás que el clan Xiao recibió un llamado del jefe del clan Ying.

Un hombre de mediana edad se presentó ante el jefe de clan Ying Xuo. Este hombre de mediana edad fue respetuoso en todo momento, este hombre no era otro que el actual líder del clan Xiao, Xiao Quan.

"Es bueno verlo líder Quan, agradezco que acuda a mi llamado". Dijo Ying Xuo de forma cortés.

"No me atrevería a ignorar un llamado del clan Ying. Estamos a su servicio, y acudiremos siempre que seamos convocados". Dijo el jefe del clan Xiao de manera muy respetuosa.

"Bien. Tomando el tema, la razón por la que te he llamado es para darte una tarea muy importante, esta tarea fue dejada por mi padre antes de entrar en cultivo aislado". Xiao Quan se puso aún más serio al escuchar que la tarea venía de un gran patriarca mayor.

Ying Xuo continuó. "La tarea puede ser relativamente sencilla, se trata de asignar a un sirviente para mi sobrino, este sobrino llegó con mi padre hace un mes atrás, por el momento asigné de forma temporal a dos jóvenes del clan Yao. Pero creí que sería mejor asignar a miembros del clan Xiao. ¿Qué te parece?". Dijo mientras esperaba su respuesta.

Sin dudar Xiao Quan respondió. "No tengo ninguna objeción, lo haremos tal y como lo ha solicitado. ¿Tiene a alguien en mente para esta tarea?".

"Dejaré esa elección al clan Xiao... Casi lo olvido, este sobrino mío ha recibido el título de patriarca menor, te digo esto para que consideres lo que harás". Dijo Ying Xuo con solemnidad.

...

Después de salir, Xiao Quan regreso directamente al clan Xiao. Inmediatamente a su llegada llamó a todos los miembros importantes para una reunión. Todos se reunieron rápidamente y una vez que todos llegaron Xiao Quan procedió a explicar todo lo que el jefe del clan Ying le había dicho.

Al finalizar la explicación dada por el jefe de clan, uno de los miembros presentes habló. "Jefe de clan, por lo que ha dicho creo que el jefe del clan Ying nos está poniendo a prueba, desde los inicios de nuestro clan juramos lealtad a cambio de la protección, en cambio el clan Ying nos permitió crecer y hasta el día de hoy nos hemos desarrollado colocándonos por encima de los otros 6 clanes al servicio del clan Ying, esto ha dado cierta confianza a los demás miembros de nuestro clan, al punto de que han olvidado cuál es nuestra posición originalmente".

Otro de los miembros continuó. "Todos los presentes sabemos que cerca de la mitad de nuestros miembros poseen una arrogancia producto de toda la excesiva confianza que se nos ha brindado.

También saben que desde que esto comenzó el clan Ying nos ha ido expulsando de puestos importantes dándonos las tareas de los demás clanes sirvientes como antes nos correspondía, esto levantó la molestia de algunos miembros que para desquitar esa molestia se negaron a realizar las actividades correspondientes, por desgracia para ellos esto fue tomado como una falta de disciplina y desobediencia, como tal el salón disciplinario salió para impartir el castigo.

Cerca de 152 miembros recibieron un daño parcial en sus mentes y se encontró una obvia manipulación de los recuerdos, otros 58 tuvieron cortes en las extremidades y más de 87 tuvieron sus cultivos destruidos con incapacidad para volver a cultivar".

El jefe de clan se hundió en pensamiento. Otro de los miembros habló sacándolo de sus pensamientos. "Hasta ahora hemos estado en la mira del salón disciplinario, aún así nuestros miembros más jóvenes siguen comportándose de una forma rebelde.

Estoy seguro de que todos nosotros tememos la destrucción de nuestro clan de seguir así. Por el momento hemos controlado la situación y nadie fuera del clan Ying y el clan Xiao sabe lo sucedido con el salón de disciplina.

Creo que con esto el clan Ying nos quiere decir que debemos ser completamente obedientes y no causar desorden que perturbe la paz dentro de la organización, sin duda es una prueba de nuestra determinación para seguir con ellos, o caso contrario para demostar nuestra resistencia a la sumisión".

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