403-Necesito una niñera

—Has estado actuando raro. ¿Hay algo de lo que debería preocuparme? —Norman apareció de la nada, dándome palmaditas en el hombro. Pegué un brinco notable, lo que solo hizo que mi hermano se interesara aún más en mi bienestar.

No era una persona que se asustara fácilmente. Nada realmente me asustaba salvo el bienestar de mis seres queridos.

Pero últimamente, he estado muy, pero que muy nervioso. No sabía qué estaba pasando, pero había anotado lo que me hacía sobresaltarme. En su mayoría, cada vez que veía a alguien, temblaba visiblemente porque a mi cerebro le tomaba tiempo procesar quién era la persona frente a mí.

—Tierra llamando a Emmet —Norman chasqueó los dedos frente a mi cara para devolverme a la realidad.

—Sí, sí, estoy bien —bromeé, moviendo mi mano para descartar sus preocupaciones. Salí de mi habitación hacia el pasillo. Él me siguió, dándose cuenta de que era hora de nuestro paseo habitual por el corredor.