Capítulo 385: ¡Cambio!

En la vasta extensión del espacio estrellado,

innumerables orbes de luz pasaban a la deriva, resplandeciendo como estrellas.

Estos orbes, grandes y pequeños, variaban en la intensidad de su resplandor.

Desde lejos, esta extensión, que se asemejaba a un cielo estrellado, parecía increíblemente hermosa.

—Esta Cámara del Tesoro del Cielo Mar es realmente una maravilla, al haber formado un espacio propio —la voz de Pequeña Hada resonó en la mente de Qin Chen.

—¿Un espacio propio?

—Al escuchar esto de Pequeña Hada, Qin Chen llegó a entender.

Resultó que este lugar, al igual que el Reino Secreto de Qi del Dragón de la Secta del Continente de Sangre, también era un mundo espacial único.

Sin embargo, comparado con el espacio del Reino Secreto de Qi del Dragón, el espacio dentro de la Cámara del Tesoro del Cielo Mar era sin duda más misterioso.

Qin Chen miró alrededor y no pudo ver ningún fin.

Solo podía ver pequeños orbes resplandeciendo con luz.

En ese momento,