—Todo sucedió demasiado rápido, demasiado de repente.
—Fue solo un momento cuando tres poderosos del Reino del Elemento Tierra fueron asesinados instantáneamente frente a los ojos de todos, como infantes sin fuerza para resistir.
—Además, la manera en que Qin Chen los desmembró fue aterradora hasta la médula.
—¿Quién podría haber imaginado que se podían desmembrar extremidades?
—Esto no era diferente a un árbol de hierro floreciendo.
—Pero de hecho, esta escena realmente se desplegó ante sus ojos.
—En ese momento, todos quedaron petrificados.
—En el corazón de todos los artistas marciales del Estado del Trueno, el Reino del Elemento Tierra era una existencia insuperable, una presencia invencible, el gobernante de todo.
—Así que ahora, al ver a Qin Chen matar sin esfuerzo a tres poderosos del Reino del Elemento Tierra, sus corazones naturalmente se llenaron de un inmenso impacto.
—Hace dos años, ¿no era él solo un Artista Marcial en el Reino de Refinación Corporal?"