Error placentero

CAPÍTULO 287

~Perspectiva de Ella~

Caleb se quedó inmóvil por un segundo o dos antes de responder, sus manos encontraron mi cintura mientras profundizaba el beso.

Mi cerebro cortocircuitó, cada pensamiento lógico reemplazado por necesidad primal.

Sabía a pecado y olía divino, y su toque encendió un fuego en mi núcleo.

No podía tener suficiente.

Me presioné contra él—su cuerpo duro un contraste perfecto con mis suaves curvas. Mi lengua se enredó con la suya, el beso se intensificaba.

«¿Qué estoy haciendo?», pensé, mi conciencia finalmente vino al rescate mientras la realidad me golpeaba como un balde de agua fría, haciendo que me retirara, mis ojos se abrieron de golpe con horror.

Una repentina ola de culpabilidad me invadió.

—Lo—lo siento —tartamudeé y me disculpé, cubriéndome la boca con el dorso de la mano mientras retrocedía—. Eso fue un error.