413

—Ser manipulada de esta manera, Liu Yueyue obviamente se puso muy nerviosa, su voz incluso comenzó a temblar ligeramente.

Parecía que el señor Wang notó algo raro, y ella explicó que se debía a cierto nerviosismo.

Cuando mi mano una vez más se adentró en esa misteriosa Tierra Santa, Liu Yueyue de repente apretó los muslos.

Lejos de detenerme, esto en vez intensificó mis sensaciones.

Liu Yueyue era increíblemente sensible; con solo unos ligeros toques ya estaba húmeda allí abajo, su piel ardientemente caliente.

—Yueyue, no te pongas nerviosa. De tu trabajo, está claro que estás bien preparada, pero hay partes que necesitan revisiones, como esta parte aquí... —Mmm.

Liu Yueyue apretó fuertemente los labios, su cuerpo se tensó, sin atreverse a hacer el más mínimo sonido inusual.

En este momento, estaba completamente empapada, la humedad incluso comenzó a fluir por sus muslos desde sus braguitas.