Un tipo grande de más de seis pies de altura cargó al frente. Este sujeto era la mano derecha de Brother Heizi, siempre se lanzaba primero en las peleas. Al ver que la oposición solo tenía unas pocas personas, sus ojos brillaron. Esto no era una pelea, era una paliza, y eso era lo que más le gustaba.
Pero tan rápido como cargó, retrocedió igual de rápido. Un pie enorme, aparentemente de la nada, lo pateó directamente en el estómago. La enorme fuerza no solo frenó su impulso, sino que también lo lanzó hacia atrás, derribando a las tres personas detrás de él. Los cuatro cayeron al suelo juntos.
—Hermanos, tengamos una buena pelea hoy —rugió Li Yifei mientras ya cargaba contra la multitud opuesta.