La investigación de Richard.

Luna estaba sentada inocentemente en su cama de hospital mientras metía los pequeños trozos de chocolate en su diminuta boca. Estaba jugueteando inocentemente con sus dedos del pie, mientras su cara algo pálida y enfermiza mostraba una expresión de satisfacción y felicidad.

María miraba la escena con una pequeña sonrisa y lamentaba no tener su cámara consigo porque Luna parecía un conejo adorable.

Isaac estaba tocando rítmicamente el reposabrazos con su dedo índice mientras miraba a Luna con una pequeña sonrisa.

También echó un vistazo a la máquina, que tenía la línea subiendo y bajando de manera constante.

No sabía completamente cuál era su propósito porque ya había otra máquina que decía las señales vitales de Luna, pero tenía el presentimiento de que era crucial para la supervivencia de Luna.

—I-Isaac, ¿quieres un poco? —preguntó Luna mientras sostenía un trozo de chocolate en su palma.

Isaac agitó la mano y respondió:

—Lo compré para ti; es tuyo.