La Relocalización del Portal del Reino.

—Mierda… —Coloso maldijo después de recibir un mensaje del Rey Miguel que le decía que se estaban retirando. El Portal del Reino estaba a solo unos pasos de distancia, pero parecía que conseguirlo sería imposible.

Frente a él, Tobi y Colorida bloqueaban el camino con miradas firmes pintadas en sus rostros.

—Volveré… —pronunció con odio—. Entonces, ¡ustedes dos morirán bajo mis pies!

—Jaja, seguro. —Tobi se colgó el arco en la espalda y saludó mientras Coloso desaparecía lentamente con una mirada de odio.

Colorida se sentó en las escaleras y habló con agotamiento.

—¡Haahh… estoy tan cansada!

—Yo también… —Tobi se sentó con los ojos caídos. Era como si de repente hubiera envejecido diez años.

En la Superfortaleza.

El Rey Miguel se levantó lentamente y vio el espacioso Centro de la Ciudad. Los residentes, que lo vieron, palidecieron de horror y corrieron.

Sin embargo, no le importaban ellos. En cambio, miró hacia la distancia, donde una nube de humo flotaba hacia el cielo.