—Bien, ahora las canicas… —murmuró Luna mientras se sentaba con las piernas cruzadas en el suelo alfombrado. Frente a ella había una pequeña mesa inscrita con un pentagrama.
Isaac colocó cinco canicas en el escritorio, rodeando el pentagrama. Luego, se sentó y miró a su novia.
Luna chasqueó los dedos, y una varita con incrustaciones de plata apareció de la nada. Luego la apuntó al dibujo del pentagrama y cerró los ojos.
—¡La Magia de Hécate, El Siete Circular, Magia Clarividente! —La punta de la varita brilló radiamente, y las cinco canicas comenzaron a brillar con la misma intensidad.
El pentagrama comenzó a desvanecerse lentamente, y un pequeño mapa apareció de allí.
Isaac se acercó y reconoció el mapa como Winterland. Reconoció el contorno del país de Starshow, y luego el condado vecino comenzó a resplandecer en rojo.
Una pequeña cruz roja apareció en el país brillante, y dos palabras emergieron con tinta negra.