Mercado negro [4]

Al llegar frente a otra puerta de metal que parecía más segura y robusta que la que daba al mercado negro, llamé una vez.

—¡Bam!

En el lado derecho de la puerta, un pequeño compartimento se abrió al cual coloqué mi tarjeta negra.

—¡Voom!

Tan pronto como coloqué mi tarjeta, una luz verde emergió del fondo del compartimento envolviendo mi tarjeta.

—¡Diiii!

Un par de segundos después de que la luz verde desapareció, escuché el sonido de un timbre proveniente del compartimento indicándome que el escaneo estaba completo.

Tomando mi tarjeta de vuelta, la puerta de metal comenzó a sonar antes de abrirse lentamente.

—¡Vam!

Al entrar en el edificio, me quedé instantáneamente atónito.

Un vestíbulo decorado lujosamente, donde al frente se encontraba un impresionante mostrador de recepción hecho de una mezcla de madera y mármol. Varios recepcionistas atendían a los huéspedes detrás del mostrador, y un débil aroma cítrico flotaba en el aire.

Como Kevin nunca había estado aquí en la novela, también era la primera vez que sabía cómo se veía este lugar.

Las palabras ni siquiera se acercaban a describir cómo realmente era un lugar en la vida real, ya que cosas como el olor, los sonidos y la atmósfera siempre tendían a ser difíciles de conceptualizar en palabras. Podías obtener una idea general de cómo era un lugar, pero nunca sería lo mismo que en la vida real. Cada vez que llegaba a un lugar nuevo, me quedaba sin palabras al ver lo diferente que era el lugar en comparación con lo que había escrito.

En este caso, a pesar de que no tenía idea de cómo se vería este lugar, todavía me sentí momentáneamente abrumado por la grandeza de este lugar.

Se asemejaba a un palacio creado para el rey de un imperio.

Piso de mármol blanco limpio, alfombras rojas sedosas, lámparas recubiertas de oro, escritorios esculpidos con esmero, este lugar lo tenía todo.

Esto era lo que realmente parecía el lujo.

Al llegar al mostrador de recepción, me dirigí hacia un empleado en el lado derecho del mostrador de recepción.

—Bienvenido a {Buscadores de mazmorras}. ¿En qué podemos ayudarle?

—Estoy buscando entrar en una mazmorra.

Sonriendo ante mi respuesta, el recepcionista sacó una pequeña tableta y me la presentó.

—Estas son todas las mazmorras disponibles que tenemos en este momento.

Desplazándome por la tableta, pude ver una gran lista de mazmorras.

Cada mazmorra tenía un círculo rojo y verde alrededor de ellas, indicando si estaban disponibles o no.

Cada mazmorra tenía un límite de cuántas personas podían entrar, y si no se respetaba el límite, la mazmorra se desestabilizaría resultando en una posible desincronización.

Una desincronización era esencialmente un fenómeno donde una mazmorra perdería su conexión con el mundo humano.

Una vez que una mazmorra perdía su conexión con el mundo humano, esencialmente volvía a ser parte del mundo demonio.

Dado que {Buscadores de mazmorras} sabían esto, se aseguraban de que el límite nunca se rompiera dejando siempre un espacio abierto.

—Actualmente tenemos tres mazmorras operativas de Rango G, 6 mazmorras de rango F, 18 mazmorras de rango D, 11 mazmorras de rango C, 13 mazmorras de rango B, y por último 4 mazmorras de rango A.

Al ver la cantidad interminable de mazmorras disponibles, me quedé sin palabras.

El número de mazmorras que estaban ocultando era suficiente para hacer que las personas se preguntaran cómo el gobierno aún no había hecho nada.

En realidad, considerando su riqueza e influencia, incluso si el gobierno central quisiera hacer algo, dudo que pudieran dañar a {Buscadores de mazmorras}. Eso a menos que quisieran comenzar una guerra en toda regla, que nadie deseaba.

Tomando la tableta, revisé rápidamente la lista de mazmorras de rango F.

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—Rango F : [Barracas de Kurus]

Descripción; Genera directamente al contratista dentro de los cuarteles del ejército demonio.

Precio; 15% del botín del contratista + Cuota de entrada de 500 U

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—Rango F : [Mar de sangre]

Descripción; Genera directamente al contratista en un entorno oceánico lleno de criaturas marítimas sedientas de sangre.

Precio: 15% del botín del contratista + Cuota de entrada de 500 U

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- Rango F: [Desolación Roja]

Descripción: Genera directamente a los contratistas en un terreno tipo desierto escaso de fuentes de agua y alimento.

Precio: 11% del botín del contratista + Cuota de entrada de 500 U

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- Rango F: [Montañas miasma]

Descripción: Genera directamente al contratista en la cima de la cordillera alta cubierta con miasma altamente tóxico.

Precio: 8% del botín del contratista + Cuota de entrada de 500 U

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- Rango F: [Bosque de la codicia]

Descripción: Genera directamente a los contratistas dentro de un bosque que tienta a las presas creando ilusiones de su deseo más profundo.

Precio: 17% del botín del contratista + Cuota de entrada de 500 U

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- Rango F: [Ira de la Tierra]

Descripción: Genera directamente al contratista cerca de un área volcánica, donde las temperaturas pueden alcanzar hasta 100 grados Celsius.

Precio: 13% del botín del contratista + Cuota de entrada de 500 U

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Hmm... ¿qué debería elegir?

Al ver la lista de mazmorras de rango F, me detuve momentáneamente para pensar cuál elegir de todas ellas.

[Mar de sangre] estaba fuera de cuestión ya que no traía ningún equipo a prueba de agua conmigo.

[Montañas miasma] era simplemente demasiado peligroso, y no tenía pociones de resistencia al veneno conmigo.

[Bosque de la codicia] tenía una cláusula del 17%, donde tendría que pagar el 17% de todas las ganancias obtenidas de la mazmorra. Eso era un poco demasiado alto para mis estándares.

Así que eso también estaba fuera de cuestión.

Esto me deja con [Ira de la Tierra], [Desolación Roja] y [Barracas de Kurus]

Mirando alternativamente las tres opciones frente a mí, después de contemplarlo por un tiempo, decidí ir con [Desolación Roja].

Tenía la cláusula del contratista más baja de 11% y la escasez de comida y agua no debería suponer ningún problema para mí que acabo de comprar un brazalete dimensional.

—Iré con [Desolación Roja]

—Muy bien, aquí tienes un contrato que necesitarás firmar antes de que podamos finalizar nuestro trato

Entregándome un contrato de tres páginas, miré pacientemente el contenido.

En resumen.

Antes de entrar a una mazmorra, revisarán el equipo que llevaré adentro para que no puedan surgir malentendidos cuando salga de la mazmorra e informe de mis ganancias.

Al salir de una mazmorra, el personal hará una revisión estricta de los artículos y cosas que sacaré para que no se hagan informes falsos cuando paguen la cláusula del contratista.

Se debía pagar por adelantado un cupón de entrada de 500 U, acompañado de un depósito de 1000 U.

El tiempo máximo que una persona podría permanecer dentro de una mazmorra era de 30 días.

Si la persona no salía dentro del tiempo designado, un escuadrón especializado entraría directamente a la mazmorra y te arrastraría de manera forzosa.

Por último, el contratista podría, en caso de emergencias, llamar a un equipo de apoyo que vendrá lo antes posible para ayudarlos si estaban en peligro.

El resultado de llamar a un equipo de apoyo resultó en la pérdida del depósito.

Al ver el contenido, asentí satisfactoriamente y lo firmé.

No había nada en particular en contra.

Eran reglas que intentaban ser lo más justas posible.

—Muchas gracias.

Sonriendo, el recepcionista tomó el papel y finalizamos el pago.

—Por favor, sígame.

Después de pagar un total de 1500 U, depósito + cuota de entrada, fui escoltado a una gran sala de espera.

[Invitado 5077684 -- Puerta 756]

Al mirar la hoja de papel que había recibido una vez completé el pago, la doblé cuidadosamente y la coloqué en mi bolsillo.

Este era mi boleto para la mazmorra, mejor no perderlo.

Dentro de la sala, había varias personas que, al igual que yo, estaban esperando para entrar a la mazmorra.

Varios camareros caminaban y servían comida y bebidas a las personas presentes dentro de la sala de espera.

Mirando alrededor por un par de segundos, me dirigí hacia un área apartada que tenía menos personas y me senté.

Si dijera que no estaba nervioso, estaría mintiendo.

Hasta ahora, mi primera semana en este mundo ha sido un viaje tranquilo.

Aparte de algunos altibajos aquí y allá en la academia, todo lo que quería lograr, lo logré.

El [Estilo Keiki] la [Semilla del límite], incluso la prueba de realidad virtual fue exitosa, ya que logré completar la tarea adicional.

Todo lo que quería lograr fue completado a la perfección.

Pero eso no significaba nada.

«No dejes que los logros se te suban a la cabeza».

Me repetía constantemente, mientras estaba a punto de entrar a la mazmorra.

Mis pequeños logros no deberían ser algo que deba tomar en serio.

No debería volverme arrogante. El hecho de que todo fuera a mi manera no significaba que todo lo demás iba a ser sencillo.

Enfrentando la mazmorra, a la que nunca había ido antes, nunca debería bajar la guardia.

No importa qué tan bien iban las cosas para mí, un pequeño error podría costarme la vida.

La arrogancia era la mejor receta para el fracaso.

Mientras hacía una introspección, intentaba ajustar mi mentalidad.

Al entrar a una mazmorra, donde había una alta tasa de mortalidad, uno no debe entrar pensando que todo estaría bien y que ningún peligro le sobrevendría.

Eso no se llamaba confianza, se llamaba estupidez.

Frente al peligro potencial, uno debe humillarse y asegurarse de darlo todo para no ser sorprendido.

—Invitado 5077684, por favor adelante.

Al escuchar mi número, me levanté y fui hacia la persona que llamó mi nombre.

Vestido con un elegante traje negro, como la mayoría de los empleados masculinos que trabajaban aquí, el hombre me llevó hacia una gran puerta.

—¡Di! ¡Di! ¡Di! ¡Di! ¡Di! ¡Di!

—¡Shaaaa!

Justo antes de que entráramos en la puerta, el empleado presionó 6 códigos clave en el candado de la puerta y luego procedió a escanear su ojo.

—¡Klang!

Después de una breve pausa, la puerta se abrió sola, permitiéndome ver lo que había detrás.

—¡!

Me quedé instantáneamente sin palabras.

Me sentí tan abrumado por el paisaje ante mí que ninguna palabra escapó de mi boca.

Un enorme vestíbulo, que se extendía tan lejos que ni siquiera podía ver el otro lado, estaba ante mí.

Tener en cuenta que mis estadísticas, comparadas con antes, eran mucho mejores, lo que significaba que mi visión mejoró drásticamente junto con mi mejora de estadísticas, y aun así no podía ver el final de este lugar.

¡Así de enorme era este lugar! Además, eso no fue lo que me dejó perplejo. Fue el hecho de que en el vestíbulo había portales warp por todas partes. Un portal warp era un dispositivo de teletransportación que permitía a una persona teletransportarse a una coordenada dada. Era similar a una puerta de mazmorra, pero a diferencia de las puertas de mazmorra, donde la ubicación estaba fija, las coordenadas de un portal warp podían cambiarse. Caminando y viendo los portales warp que eran tan altos como una casa, me sentí como una hormiga. Junto a las puertas, había individuos vestidos de blanco con máscaras que cubrían todo su rostro. Sus máscaras me recordaban a la 'Pantera Negra' en mi mundo anterior. Pero en comparación con su máscara negra, la de ellos era blanca. Después de caminar durante 10 minutos, finalmente pude ver mi puerta designada. <>

—¡Oh, hey, Eduardo!

De pie frente a la puerta, un hombre de mediana edad rubio, que tenía un cigarrillo en la boca, saludó a la persona que me escoltaba. Su cabello largo, recogido en una cola de caballo, y su barba corta sin recortar lo hacían parecer un adulto desempleado que estaba en medio de su crisis de la mediana edad.

—Sí.

Dando un simple asentimiento al hombre de mediana edad, el hombre que me escoltó aquí, Eduardo, se dio la vuelta y se preparó para marcharse.

—Tan callado como de costumbre, ¿eh?

Viendo a Eduardo irse sin ninguna respuesta, el hombre de mediana edad se dio por vencido y me miró.

—Entonces, ¿eres tú quien quiere entrar a la mazmorra?

—Sí.

—Suspiro, justo cuando pensé que tenía el día libre.

—pchhhh.

Tirando el cigarrillo al suelo, el hombre de mediana edad lo pisó.

—Bien, sígueme.

Caminando con las manos en los bolsillos, el hombre de mediana edad refunfuñó mientras caminaba hacia la puerta.

—Timoteo1, Timoteo 2, tengo un invitado aquí, así que abran la puerta.

...

...

—¡Ah, bien!

Sacando una tarjeta de su bolsillo, el hombre de mediana edad se la entregó a las dos personas vestidas de blanco que bloqueaban la puerta. Sacando una caja pequeña, uno de los guardias blancos pasó la tarjeta, y cuando la caja parpadeó en verde, se hizo a un lado.

—Adiós Timoteo1, Timoteo2, no me extrañen demasiado mientras esté fuera.

Saludando a dos guardias blancos, el hombre de mediana edad entró en la puerta y me indicó que lo siguiera. Al pisar la puerta, el hombre de mediana edad sacó un cigarrillo de su bolsillo y lo encendió. Mirándome confundido, el hombre de mediana edad habló con una sonrisa.

—No te preocupes, siempre son así. Solo son tímidos.

—Uh, claro.

«Estoy bastante seguro de que no eran tímidos. Simplemente no querían hablar contigo». Refuté en mi cabeza sin mostrarlo en mi cara. Pronto, a medida que el portal warp se iluminó, sentí mi cuerpo levantarse lentamente del suelo. Luego vi cómo mi cuerpo se convertía en partículas y poco después comencé a perder todos mis sentidos. Primero comenzó con mi visión, luego mi audición, y lentamente todos mis sentidos restantes.

—¡Vam!