Exámenes parciales [1]

—¡Clink!

«¡Bastardo! ¡Bastardo! ¡Bastardo!»

Entrando en su dormitorio, Emma furiosamente arrojó sus cosas sobre su cama. Su humor no podía ser peor.

«¡Cómo te atreves a ignorarme así!»

Esta fue la primera vez que se sintió tan irrespetada. Durante todo su trayecto en tren hacia el Cerradura, se sentó junto al chico que más le daba curiosidad. El chico a quien sospechaba le había salvado la vida en Hollberg.

...y no estaba equivocada. Él admitió descaradamente este hecho cuando lo restregó en su cara. Solo recordar la sonrisa que tenía en su rostro mientras lo admitía abiertamente la irritaba sin fin.

Aunque esto la molestaba, no era lo que realmente la irritaba. No. Lo que la irritaba era el hecho de que él la había ignorado completamente después de que ella respondió su pregunta. No importaba lo que hiciera, él no respondía ni reconocía su existencia. Como si ella no fuera más que aire.

Ghhhhh