—He estado esperando por ti...
Caminando lentamente en mi dirección, Arnold sonrió con malicia.
—...Debería haberme ocupado de ti poco después de lo que sucedió en el mundo virtual, pero debido a todo lo que pasó en Hollberg y las muchas otras cosas que ocurren en mi vida, me olvidé completamente de un insecto como tú.
—Pero no te preocupes, ahora que lo recuerdo, me aseguraré de que sufras...
—¡Grieta!
Crackeando su cuello, Arnold me miró con desdén.
—Comencemos haciendo que falles el examen.
Viendo a Arnold caminar en mi dirección, levantando las manos, retrocedí lentamente. Sonriendo irónicamente, dije:
—...Ah, Arnold, hablemos de las cosas. ¿No nos pongamos físicos, verdad?
—Sí. Hablaremos. Pero no con nuestras bocas.
—¡Boom!
Terminando con lo que quería decir, Arnold tensó sus pantorrillas y propulsó su cuerpo hacia adelante. Como una bala, rápidamente apareció ante mí. Notando sus acciones, mientras lo veía aparecer ante mí, no pude evitar maldecir en voz alta: