—Ghhh...
Después de un período desconocido de tiempo, sintiendo que la luz penetraba a través de la rendija de mis párpados estimulando mis pupilas, abrí lentamente los ojos.
Al abrir los ojos, lo que vi fue un cielo azul desprovisto de nubes. Un rico aroma de la naturaleza invadió mis fosas nasales causando que mi mente nublada se despejara lentamente.
Mientras yacía en el suelo mirando al cielo, lo primero que atrapó mi vista fue la imagen de tres esferas amarillas brillantes flotando en el cielo.
«...¿son esos soles?»
Mientras miraba las tres esferas amarillas en el cielo, después de un par de segundos tuve que apartar la vista debido a la sensación punzante en mis ojos.
...Eran en efecto tres soles.
Estaba en Immorra... y los tres soles eran prueba de ello.